Emprender

Sumamos esfuerzos para fortalecer emprendimientos productivos y capacidades de mujeres y jóvenes

Con el objetivo de reducir la vulnerabilidad socioeconómica de jóvenes, adolescentes y mujeres adultas en el contexto post covid-19, la Coordinadora de la Mujer, la ONG FIE, el Centro de Capacitación e Investigación de la Mujer Campesina de Tarija (CCIMCAT), el Instituto de Formación Femenina Integral (IFFI) y Campaña Boliviana por el Derecho a la Educación, presentaron la iniciativa “Mujeres, jóvenes y adolescentes acelerando la Ruta 2030: Por el cumplimiento y exigibilidad del derecho a la Educación y los derechos económicos afectados post pandemia Covid-19”, que busca alcanzar a cerca de dos mil mujeres y jóvenes de ocho municipios del país. La iniciativa cuenta con el financiamiento de la Unión Europea.

“Aprender y fortalecer para emprender” es el eslogan de la iniciativa que fue lanzada oficialmente hoy en La Paz, con la presencia de representantes de las organizaciones antes mencionadas y de la Unión Europea, y que resumen sus tres principales componentes: el ámbito productivo, el educativo y el de incidencia y sensibilización.

En el ámbito productivo, la iniciativa apunta a fortalecer los conocimientos y capacidades de mujeres y jóvenes para los emprendimientos con énfasis en la innovación y las nuevas tecnologías. Así también, mejorar sus oportunidades de acceso a mercados físicos y virtuales para la comercialización de sus productos.

En esta línea, se prevé la implementación de una plataforma de Marketplace exclusiva para emprendimientos, alrededor de 500 páginas web para visibilizar diferentes iniciativas productivas y un conjunto de espacios de formación presenciales y virtuales para fortalecer los conocimientos de las y los participantes. Talleres sobre comercio electrónico y fotografía publicitaria, entre otros, son parte de la oferta formativa.

Bolivia, al igual que el resto del mundo, sufrió lo embates de la crisis económica generada por la pandemia del coronavirus. El desempleo, la precariedad laboral y el incremento del trabajo de cuidados no remunerado impactaron de manera particular en la autonomía económica de las mujeres, quienes, en muchos casos, se han visto en la necesidad de apostar por pequeños y esporádicos emprendimientos que les permita generar ingresos económicos para sus familias.

Según un reciente estudio realizado por las organizaciones que impulsan esta iniciativa, 7 de cada 10 emprendimientos de mujeres y jóvenes no tienen más de tres años de antigüedad –es decir que emergieron en plena pandemia– y 6 de cada 10 lo hicieron por necesidad o subsistencia. La mayor parte de estos emprendimientos utilizan medios digitales (Facebook y WhatsApp), además de los físicos, para comercializar sus productos; sin embargo, la disponibilidad de recursos tecnológicos y conectividad en las micro y pequeñas empresas y emprendimientos de subsistencia es escasa.

En el ámbito de la educación, la iniciativa trabajará con estudiantes de secundaria del sistema regular y del alternativo, a fin de contribuir al fortalecimiento de sus habilidades y conocimientos socioemocionales, con énfasis en las temáticas de igualdad de género, educación integral para la sexualidad, prevención de la violencia, incidencia en políticas públicas y STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés).

En este ámbito, el proyecto tiene particular interés de trabajar con estudiantes de educación alternativa en riesgo de deserción escolar, pues ello contribuiría a profundizar su vulnerabilidad, acrecentada por la pandemia. En marzo de 2021, el Banco Mundial advirtió que la tasa de deserción escolar en Bolivia podría rondar el 20%, situando al país como uno de los de mayor abandono escolar en América Latina y el Caribe.

Según el citado estudio, una de las principales razones por las que estudiantes de secundaria dejan el colegio es por la necesidad de trabajar y por los embarazos adolescentes.

Asimismo, a través de esta iniciativa conjunta se busca contribuir al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) hacia la ruta 2030, a desarrollar acciones de incidencia en las políticas públicas para promover: Resiliencia e incentivos para mujeres y jóvenes emprendedores; inclusión en el currículo educativo una educación integral en derechos humanos, Educación Integral para la Sexualidad y lucha contra las violencias; disminución de brechas en la participación de las mujeres en áreas técnicas y tecnológicas.

Así, “Aprender y fortalecer para emprender” se presenta como una posibilidad esperanzadora para más de un millar de mujeres y jóvenes de hasta 40 años de edad de los municipios de Quillacollo, Colcapirhua y Cochabamba, en Cochabamba; La Paz y El Alto, en La Paz; y Padcaya, Entre Ríos y Yacuiba, en Tarija. Con la premisa de que la crisis también puede ser una oportunidad, esta iniciativa desafía a mujeres y jóvenes a “reinventarse” en pandemia. (28/09/22)